El dolor de rodilla puede ponerte las cosas difíciles. Tanto si te lleva a la inmovilidad total, a una molestia constante o a un dolor persistente cuando practicas tu deporte favorito, quieres alivio. Tu especialista en tratamiento del dolor del Centro de Diagnóstico y Tratamiento Medex, a menudo en consulta con otro especialista de la consulta multiespecialidad de Queens (Nueva York), tiene soluciones reales. Desde medidas preventivas proactivas hasta terapias y tratamientos específicos, el equipo de médicos de Medex te ofrece una gran experiencia y numerosas opciones. Llama hoy para concertar una cita y librarte del dolor de rodilla.
El dolor de rodilla es una dolencia frecuente, pero que afecta a tu calidad de vida e impide tus actividades cotidianas. Para empeorar las cosas, hay muchos factores que pueden causar dolor de rodilla. Tu médico especialista en tratamiento del dolor del Centro de Diagnóstico y Tratamiento Medex de Queens (Nueva York) sabe cómo descubrir la causa de tu dolor de rodilla. Sólo entonces puede empezar el tratamiento.
Puede que tengas los primeros síntomas de dolor de rodilla. De hecho, ése es el mejor momento para visitar a un especialista de rodilla. Minimizarás el dolor de rodilla con una intervención precoz y estrategias de autocuidado. En el artículo«Tabla de localización del dolor de rodilla«, clasificamos los problemas más frecuentes relacionados con la rodilla en función de su localización, para ayudarte a comprender mejor las posibles causas y las opciones de tratamiento.
Tu médico del tratamiento del dolor habla de prevención durante tu primera visita. Incluso tu médico de atención primaria hace hincapié en la atención preventiva. Pero si ya te duele la rodilla, el centro de especialidades múltiples Medex dispone de una capacidad de pruebas avanzada y en profundidad para descubrir exactamente la causa de tu dolor de rodilla.
La mayoría de los dolores de rodilla están causados por una lesión o un movimiento repetitivo. Si corres, haces senderismo o trabajas en situaciones que requieren flexión constante, puedes acabar con dolor de rodilla. El envejecimiento -y las consecuencias de años de desgaste- pasa factura a tus rodillas.
Afecciones subyacentes como la artritis y la obesidad suelen tener un impacto directo en la salud de tus rodillas. La prevención del dolor de rodilla empieza por seguir los consejos de tu médico para el tratamiento del dolor:
Sin el tratamiento adecuado, tu dolor de rodilla puede empeorar o hacerse crónico. La artritis no tratada puede causar daños duraderos en el cartílago de la rodilla. Otros riesgos de desarrollar dolor de rodilla son
Si te duele la rodilla, haz que te la examinen. Es mejor tratar el dolor de rodilla cuanto antes. El dolor de rodilla rara vez desaparece por sí solo, y cuanto más esperes, más puede empeorar.
En el Centro de Diagnóstico y Tratamiento Medex, especialistas de una amplia gama de especialidades médicas colaboran para tratarte. Los diagnósticos, como radiografías y escáneres digitales, revelan el alcance del daño en tu rodilla. Ya sea debido a una lesión o accidente deportivo o laboral, el médico determina la causa de tu dolor. Puede ser una:
Cuando el autocuidado y los tratamientos caseros no proporcionan suficiente alivio, tu médico especialista en el tratamiento del dolor de Queens, Nueva York, puede enviarte a fisioterapia para reconstruir la fuerza de la rodilla y entrenarte para moverte de forma que no provoques más lesiones.
Tu médico supervisa tu fisioterapia para asegurarse de que se satisfacen tus necesidades específicas. Algunas de las herramientas y técnicas disponibles a través de tu fisioterapeuta Medex incluyen:
Dependiendo de la gravedad de tu dolor y de la eficacia de los cambios en tu estilo de vida y de las sesiones de fisioterapia, tu médico especialista en el tratamiento del dolor puede decidir probar una técnica más invasiva. Incluso la cirugía mínimamente invasiva se pospone hasta que sepa que los demás tratamientos no te han funcionado.
Afortunadamente, tu médico del Centro de Diagnóstico y Tratamiento Medex tiene acceso a una amplia gama de tratamientos más intensos para tratar el dolor persistente de rodilla. A veces, se requieren procedimientos mínimamente invasivos o no invasivos para garantizar que tu dolor se trata por completo. Estos tratamientos del dolor de rodilla incluyen:
Los analgésicos recetados son útiles durante un breve periodo de tiempo, pero la cirugía, incluida la artroplastia de rodilla, es siempre el último recurso. Tu especialista en tratamiento del dolor trabaja para proporcionarte el máximo alivio del dolor y devolverte a un estilo de vida activo. No sufras innecesariamente con el dolor de rodilla. Ponte en contacto con el Centro de Diagnóstico y Tratamiento Medex de Queens para obtener las opciones de tratamiento de rodilla más completas.
Podemos ayudarte a encontrar médico. Llama al (718) 275-8900
Con licencia del estado de Nueva York, Medex es un centro de diagnóstico y tratamiento del artículo 28. Nuestros médicos proporcionan atención integral a pacientes de todas las edades en la zona de Forest Hills, Queens, desde hace más de 15 años. Empieza a recibir atención experta ahora llamando o concertando una cita en línea con uno de los especialistas cualificados.
¿A quién acudir por dolor de rodilla?
Si tienes dolor de rodilla, el mejor especialista al que acudir depende de la gravedad y la causa de tu dolencia. En caso de lesiones repentinas, hinchazón o dolor intenso, acude a un médico ortopédico cercano o a un especialista en medicina deportiva, ya que ellos diagnostican y tratan las lesiones articulares, la artritis y los problemas crónicos de rodilla. Para el dolor leve o moderado o los problemas de movilidad, un médico de atención primaria o un fisioterapeuta pueden proporcionarte evaluaciones iniciales, ejercicios y estrategias de control del dolor. Si tu dolor se debe a una inflamación o a afecciones autoinmunes como la artritis reumatoide, un reumatólogo puede ser la mejor opción. En caso de dolor persistente o que empeora, buscar consejo médico pronto puede evitar daños a largo plazo y mejorar los resultados de la recuperación.
¿Qué ayuda al dolor de rodilla hueso contra hueso sin cirugía?
Para aliviar el dolor óseo de rodilla sin cirugía, céntrate en ejercicios de bajo impacto, como la natación o el ciclismo, para fortalecer los músculos y reducir la tensión articular. Controlar el peso ayuda a aliviar la presión sobre las rodillas, mientras que la fisioterapia mejora la flexibilidad y la movilidad. Las ortesis o las plantillas ortopédicas pueden proporcionar apoyo adicional, y los medicamentos antiinflamatorios o las inyecciones de cortisona pueden reducir el dolor y la hinchazón. Los suplementos como la glucosamina y la condroitina pueden ayudar a la salud articular, y las inyecciones de ácido hialurónico pueden mejorar la lubricación. Las terapias alternativas como la acupuntura o las inyecciones también pueden ofrecer alivio. Consulta siempre a un médico para un plan de tratamiento personalizado.
¿Qué causa el dolor de rodilla tras una operación de prótesis de cadera?
El dolor de rodilla tras una operación de prótesis de cadera suele deberse a cambios en la alineación de las piernas, alteraciones de la marcha o desequilibrios musculares a medida que el cuerpo se adapta a la nueva articulación de la cadera. Unos músculos débiles o tensos, sobre todo en los cuádriceps, isquiotibiales o glúteos, pueden ejercer una tensión adicional sobre la rodilla. La inflamación, la hinchazón o la irritación nerviosa de la operación también pueden contribuir a las molestias. Si la pierna operada se alarga o acorta ligeramente, puede afectar a la mecánica de la rodilla, provocando dolor. La artritis preexistente en la rodilla o el uso excesivo durante la recuperación pueden empeorar los síntomas. La fisioterapia, un calzado adecuado y ejercicios graduales de fortalecimiento pueden ayudar a aliviar el dolor de rodilla tras una operación de prótesis de cadera.
¿Cómo solucionar al instante el dolor de rodilla al subir y bajar escaleras?
Para reducir instantáneamente el dolor de rodilla al subir y bajar escaleras, utiliza la técnica del «escalón con apoyo», subiendo con la pierna más fuerte y bajando con la más débil. Ejerce la fuerza central y utiliza una barandilla para reducir la presión sobre la articulación de la rodilla. Llevar calzado de apoyo o una rodillera puede proporcionar amortiguación y alineación adicionales. Aplicar hielo o utilizar un analgésico tópico antes de la actividad puede ayudar a reducir la inflamación. Fortalecer los cuádriceps, isquiotibiales y glúteos mediante ejercicios de bajo impacto, como elevaciones de piernas y step-ups, puede mejorar la estabilidad y la función de la rodilla a largo plazo.
¿Qué ayuda al dolor nervioso tras la artroplastia de rodilla?
Para aliviar el dolor nervioso tras la artroplastia de rodilla, prueba a hacer estiramientos suaves y ejercicios de deslizamiento nervioso para mejorar la movilidad y reducir la irritación nerviosa. Los analgésicos de venta libre, los medicamentos recetados para el dolor nervioso (como la gabapentina) o los antiinflamatorios pueden ayudar a controlar las molestias. La terapia con frío puede adormecer el dolor agudo, mientras que la terapia con calor relaja los músculos y mejora la circulación. Los masajes, la acupuntura o la estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (ENET) pueden proporcionar un alivio adicional. Si el dolor persiste, consulta a tu médico <ahref=»https://www.medexdtc.com/orthopedics/»>sobre bloqueos nerviosos u otros tratamientos avanzados para controlar eficazmente el dolor nervioso posquirúrgico.
¿A qué médico acudir para el dolor de rodilla?
Para el dolor de rodilla, el mejor médico al que acudir depende de la causa y gravedad de tus síntomas. Un médico ortopédico o especialista en medicina deportiva es ideal para diagnosticar y tratar lesiones, artritis y afecciones crónicas de rodilla. Un médico de atención primaria puede evaluar el dolor de leve a moderado y remitirte a un especialista si es necesario. Si tu dolor está causado por una inflamación o un trastorno autoinmune como la artritis reumatoide, un reumatólogo es la mejor opción. Un fisioterapeuta puede ayudarte con ejercicios de rehabilitación y fortalecimiento para mejorar la movilidad. Buscar atención médica pronto puede evitar daños mayores y acelerar la recuperación.
¿Por qué no puedo doblar la rodilla completamente hacia atrás sin dolor?
Si no puedes doblar la rodilla completamente hacia atrás sin dolor, podría deberse a lesiones, inflamación o rigidez articular. Entre las causas más comunes están las roturas de menisco, las lesiones de ligamentos, la artritis o la tendinitis rotuliana, que pueden limitar la flexibilidad y causar molestias. La inflamación por uso excesivo, la bursitis o la acumulación de tejido cicatricial tras una operación o lesión también pueden restringir el movimiento. La tensión muscular en los isquiotibiales o los cuádriceps puede contribuir a la rigidez y el dolor. La aplicación de hielo o calor, los estiramientos y los ejercicios de fisioterapia pueden ayudar a mejorar la movilidad. Si el dolor persiste, consulta a un traumatólogo para que diagnostique el problema subyacente y evite mayores daños articulares.
¿Qué causa el dolor detrás de la rodilla después de una artroplastia total de rodilla?
El dolor detrás de la rodilla tras una artroplastia total de rodilla suele deberse a hinchazón, tensión muscular o irritación nerviosa, a medida que el cuerpo se adapta a la nueva articulación. La distensión de los músculos isquiotibiales o de la pantorrilla, la acumulación de tejido cicatricial o la inflamación del tendón poplíteo o la bursa también pueden contribuir a las molestias. En algunos casos, la causa puede ser una trombosis venosa profunda (TVP) o una alineación inadecuada del implante. Los estiramientos suaves, la fisioterapia, el tratamiento con hielo o calor y los antiinflamatorios pueden ayudar a aliviar el dolor. Si los síntomas persisten o empeoran, consulta a tu cirujano para descartar complicaciones y garantizar una curación adecuada.
¿Qué causa el dolor de rodilla al ponerse en cuclillas?
El dolor de rodilla al ponerse en cuclillas puede deberse a varios factores, como desequilibrios musculares, uso excesivo o forma incorrecta. Entre las causas más comunes están la tendinitis rotuliana, en la que se inflama el tendón situado debajo de la rótula, o el síndrome de dolor patelofemoral, que se produce por una mala alineación de la rótula durante el movimiento. La artrosis puede provocar dolor por degeneración articular, mientras que las lesiones de ligamentos (como la rotura del ligamento cruzado anterior) o las roturas de menisco también pueden causar molestias. Los cuádriceps, isquiotibiales o gemelos tensos pueden contribuir al dolor, al igual que la debilidad de los músculos estabilizadores alrededor de la rodilla. Mejorar la forma, fortalecer los músculos y utilizar calzado de apoyo puede ayudar a aliviar el dolor. Si los síntomas persisten, debe consultarse a un profesional sanitario para determinar la causa exacta.
¿Cómo tratar el dolor ardiente de rodilla?
El dolor ardiente de rodilla puede tratarse abordando la causa subyacente, como la inflamación, la irritación nerviosa o el uso excesivo. La aplicación de compresas frías ayuda a reducir la inflamación y adormecer el dolor, mientras que la terapia con calor puede relajar los músculos tensos y mejorar el flujo sanguíneo. Los antiinflamatorios sin receta o los analgésicos tópicos pueden proporcionar un alivio temporal. La fisioterapia centrada en el fortalecimiento de los músculos que rodean la rodilla puede reducir la presión sobre la articulación. Si la sensación de quemazón está causada por problemas nerviosos, pueden ser útiles los analgésicos nerviosos como la gabapentina o una unidad TENS. Si el dolor persiste o empeora, consulta a un médico para descartar afecciones como la compresión nerviosa, la bursitis o la artritis, y recibir un plan de tratamiento personalizado.
¿Puede la fascitis plantar causar dolor de rodilla?
Sí, la fascitis plantar puede causar dolor de rodilla debido a la naturaleza interconectada del sistema musculoesquelético del cuerpo. Cuando la fascia plantar (el ligamento que sostiene el arco del pie) se inflama, puede alterar tu forma de andar y provocar desequilibrios en la parte inferior del cuerpo. Esto puede suponer una carga adicional para las rodillas, las caderas y la parte inferior de la espalda, lo que puede causar dolor o molestias en estas zonas. Con el tiempo, esta desalineación puede provocar dolor de rodilla, sobre todo si el arco del pie se hunde o si el dolor de talón hace que desplaces el peso de forma desigual. Tratar la fascitis plantar con ejercicios de estiramiento, calzado de apoyo, plantillas ortopédicas y descanso puede ayudar a aliviar el dolor de rodilla al corregir estos desequilibrios.
¿Puede la ciática causar dolor de rodilla?
Sí, la ciática puede causar dolor de rodilla, ya que es el resultado de la compresión o irritación del nervio ciático, que va desde la parte baja de la espalda hasta cada pierna, pasando por las caderas. Cuando el nervio ciático se ve afectado, puede provocar dolor, entumecimiento u hormigueo que se irradia hacia la pierna, incluida la rodilla. Las molestias pueden sentirse directamente en la rodilla o en las zonas circundantes, ya que las vías nerviosas afectan a toda la extremidad inferior. El dolor de rodilla relacionado con la ciática suele ir acompañado de otros síntomas, como dolor lumbar, dolor de cadera o debilidad en la pierna. El tratamiento puede incluir fisioterapia, ejercicios de estiramiento, antiinflamatorios o analgésicos nerviosos para reducir la irritación y mejorar la movilidad.
¿Pueden los isquiotibiales tensos causar dolor de rodilla?
Sí, unos isquiotibiales tensos pueden causar dolor de rodilla al crear desequilibrios en los músculos que rodean la rodilla. Cuando los isquiotibiales están tensos, pueden tirar de la pelvis y cambiar la alineación de la articulación de la rodilla, aumentando la tensión sobre las estructuras de la rodilla, incluidos el tendón rotuliano y los ligamentos. Esta alineación alterada puede provocar dolor en la rodilla durante actividades como ponerse en cuclillas, caminar o subir escaleras. Además, unos isquiotibiales tensos pueden contribuir a la debilidad o inestabilidad muscular alrededor de la rodilla, haciéndola más susceptible a lesiones o molestias. Estirar y fortalecer los isquiotibiales, junto con ejercicios regulares de movilidad, puede ayudar a aliviar el dolor de rodilla causado por la tensión en los isquiotibiales.
¿Qué causa el dolor de rodilla en las mujeres?
El dolor de rodilla en las mujeres puede deberse a diversos factores, como diferencias biomecánicas, cambios hormonales y factores relacionados con el estilo de vida. Las mujeres son más propensas a sufrir lesiones de rodilla debido a la mayor anchura de sus caderas, que puede afectar a la alineación y aumentar la tensión sobre la articulación de la rodilla. Afecciones como el síndrome de dolor patelofemoral, la artrosis o las lesiones de ligamentos (como la rotura del LCA) son culpables habituales. Las fluctuaciones hormonales, especialmente durante el embarazo o la menopausia, pueden afectar a la estabilidad de la articulación, mientras que el uso excesivo, la falta de ejercicio o un calzado inadecuado también pueden contribuir a las molestias. Además, los desequilibrios musculares, sobre todo unos cuádriceps débiles o unos isquiotibiales tensos, pueden provocar dolor de rodilla. El ejercicio regular, una postura adecuada y la fisioterapia pueden ayudar a prevenir y tratar el dolor de rodilla en las mujeres.
¿Cuáles son las 3 inyecciones para el dolor de rodilla?
Las tres inyecciones habituales para el dolor de rodilla son las inyecciones de corticoesteroides y las inyecciones de ácido hialurónico (viscosuplementación). Las inyecciones de corticoesteroides se utilizan para reducir la inflamación y aliviar el dolor a corto plazo, sobre todo en afecciones como la artritis. Las inyecciones de ácido hialurónico ayudan a lubricar la articulación de la rodilla, mejorando la movilidad y reduciendo el dolor causado por la artrosis. Las inyecciones de PRP, que consisten en utilizar las plaquetas de la sangre del propio paciente para promover la curación, suelen utilizarse para problemas y lesiones de rodilla más crónicos, a fin de estimular la reparación de los tejidos. Cada una de estas inyecciones tiene beneficios distintos según la causa subyacente del dolor de rodilla, y tu médico te recomendará la mejor opción en función de tu estado concreto.
¿Cuánto dura el dolor tras una prótesis de rodilla?
El dolor tras la artroplastia de rodilla suele durar de varias semanas a meses, y la mayoría de los pacientes experimentan un alivio significativo en los primeros 3 a 6 meses. Al principio, el dolor agudo de la operación y la hinchazón es frecuente, y puede tratarse con analgésicos, hielo y fisioterapia. Pueden persistir molestias leves o moderadas durante 3 a 6 meses, sobre todo con la actividad, a medida que el cuerpo se adapta a la nueva articulación de la rodilla. En algunos pacientes, el dolor leve o la rigidez pueden continuar hasta un año, sobre todo si hay tejido cicatricial o debilidad muscular. Sin embargo, la mayoría de las personas experimentan una reducción significativa del dolor y una mejora de la movilidad en 6 meses, con alivio del dolor a largo plazo al cabo de un año. La fisioterapia regular y el cumplimiento de los cuidados postoperatorios pueden ayudar a acelerar la recuperación y reducir el dolor.
¿Qué causa el dolor repentino de rodilla sin lesión?
El dolor repentino de rodilla sin lesión puede deberse a varias afecciones, como la artritis, en la que la inflamación de la articulación provoca un dolor agudo o punzante, o la bursitis, que es la inflamación de los sacos llenos de líquido que amortiguan la rodilla. La tendinitis, especialmente en el tendón rotuliano, también puede causar un dolor repentino debido a un uso excesivo o a un esfuerzo. Otras causas son la gota, en la que se acumulan cristales de ácido úrico en la articulación, y el síndrome de plica, que se produce cuando se irrita el revestimiento de la articulación de la rodilla. Además, las roturas de menisco o los problemas de ligamentos no siempre están relacionados con una lesión concreta, pero pueden provocar un dolor inesperado. En algunos casos, el dolor de rodilla también puede referirse como dolor de cadera o lumbar, lo que pone de relieve la necesidad de un diagnóstico adecuado por parte de un médico para determinar la causa subyacente.
¿Qué es mejor para el dolor de rodilla, el calor o el frío?
Para el dolor de rodilla, la terapia con frío es mejor para las lesiones agudas, la hinchazón y la inflamación, ya que reduce el flujo sanguíneo y adormece el dolor -ideal para esguinces, torceduras o agujetas post-entrenamiento. La terapia con calor funciona mejor para el dolor crónico, la rigidez y la artritis, ya que aumenta la circulación sanguínea, relaja los músculos y mejora la movilidad. Si la rodilla está inflamada, empieza con hielo durante 15-20 minutos cada pocas horas, y luego pasa al calor una vez que disminuya la inflamación para aliviar la rigidez. Evita el calor en una rodilla inflamada y el hielo si tienes mala circulación. En caso de dolor persistente, consulta a un médico para determinar el mejor tratamiento.
¿Cómo aliviar el dolor de rodilla?
Para aliviar el dolor de rodilla, empieza con reposo, hielo y elevación para reducir la hinchazón y la inflamación. Aplicar una bolsa de hielo durante 15-20 minutos varias veces al día puede insensibilizar la zona y aliviar las molestias. Los antiinflamatorios de venta libre, como el ibuprofeno o el paracetamol, también pueden ayudar a controlar el dolor. Los ejercicios suaves de estiramiento y fortalecimiento de los músculos que rodean la rodilla, incluidos los cuádriceps, isquiotibiales y gemelos, pueden mejorar la estabilidad y reducir la presión sobre la articulación. El uso de calzado de apoyo y rodilleras puede proporcionar mayor comodidad y alineación. En caso de dolor persistente o intenso, consulta a un médico sobre opciones como la fisioterapia, las inyecciones de corticoesteroides o las inyecciones de ácido hialurónico para mejorar la movilidad y reducir la inflamación.
¿Qué causa el dolor de rodilla?
El dolor de rodilla puede deberse a diversos factores, como lesiones, como esguinces, distensiones, roturas de ligamentos (como las lesiones del LCA) o roturas de menisco, que suelen producirse por movimientos bruscos o traumatismos. La artritis, sobre todo la artrosis, es una causa frecuente de dolor crónico de rodilla, debido al desgaste del cartílago articular. La tendinitis y la bursitis, derivadas del uso excesivo o la inflamación de los tendones y los sacos llenos de líquido que rodean la rodilla, también pueden provocar dolor. Otras causas son el mal trazado rotuliano, la gota y los desequilibrios musculares alrededor de la rodilla que ejercen una tensión adicional sobre la articulación. En algunos casos, el dolor de rodilla puede derivarse de problemas en las caderas o la zona lumbar. Identificar la causa raíz es esencial para un tratamiento y control eficaces del dolor de rodilla.
¿Cómo deshacerse rápidamente del dolor de rodilla?
Para deshacerte rápidamente del dolor de rodilla, empieza por dejar descansar la rodilla y aplicar hielo durante 15-20 minutos cada 1-2 horas para reducir la inflamación y adormecer la zona. Tomar antiinflamatorios sin receta, como el ibuprofeno, puede ayudar a aliviar el dolor y la hinchazón. Utiliza compresión (como una venda elástica o una rodillera) y eleva la rodilla para minimizar la hinchazón. Realizar estiramientos suaves y ejercicios de movilidad puede ayudar a aliviar la rigidez, pero evita el sobreesfuerzo. Si el dolor persiste, considera la posibilidad de utilizar analgésicos tópicos o terapia con calor para relajar los músculos una vez se haya reducido la inflamación inicial. En caso de dolor persistente, es esencial consultar a un profesional sanitario para que te indique un plan de tratamiento a medida.